La Ley de Comunicación Social, aprobada por la Asamblea Nacional del Poder Popular, tiene como objetivo regular el Sistema de Comunicación Social en Cuba, abarcando los ámbitos organizacional, mediático y comunitario, tanto en los espacios públicos físicos como digitales. Busca establecer un marco legal que permita el desarrollo de una comunicación plural, diversa y respetuosa de los derechos humanos.
Esta norma jurídica se caracteriza por su enfoque integral. No solo regula los medios de comunicación tradicionales, sino también los digitales y las redes sociales. Además, promueve la participación ciudadana en los procesos de comunicación y fomenta la transparencia y la rendición de cuentas.
A continuación, analizaremos los aspectos clave de esta ley:
- Objetivos y Alcance: La ley busca gestionar estratégicamente los procesos de comunicación social. Su enfoque abarca fines políticos, de bien público, organizacionales y comerciales. Además, establece principios para todos los medios de comunicación en el país.
- Educación y Alfabetización Mediática: Promueve la educación para la comunicación y la alfabetización mediática e informacional. Esto es crucial para enfrentar los desafíos actuales en el ámbito de la seguridad nacional.
- Transparencia y Comunicación Interna: La ley enfatiza la comunicación transparente con los ciudadanos y la necesidad de explicar los cambios. La resistencia al cambio es un factor importante, y la comunicación efectiva es clave para superarla.
- Rol de los Líderes: Los líderes desempeñan un papel fundamental en la implementación de cambios organizativos. Su compromiso y coherencia son esenciales para inspirar confianza en el proceso.
- Evaluación Continua: La ley insta a evaluar la efectividad de los cambios implementados. Aprender de la experiencia y ajustar las estrategias es vital para el éxito a largo plazo.
- Principios de Organización y Funcionamiento: Siguiendo el mandato constitucional, la ley establece los principios de organización y funcionamiento para todos los medios de comunicación social en Cuba.
Sin embargo, la implementación de esta ley también enfrenta varios desafíos. Uno de los principales es garantizar su cumplimiento en un contexto de rápida transformación digital. Es necesario, además, seguir trabajando para superar los retos que su implementación presenta y para asegurar que contribuya efectivamente a la construcción de una sociedad más informada, participativa y democrática.
La Ley de Comunicación Social es un paso significativo hacia una gestión más estratégica e integrada de la comunicación en Cuba. Su enfoque en la sostenibilidad y la adaptación a los desafíos contemporáneos refleja la importancia de la comunicación en una sociedad en constante cambio.